Al menos 47 personas murieron y 94 resultaron heridas en las últimas 24 horas debido a los ataques aéreos israelíes en la Franja de Gaza, según el último informe del Ministerio de Salud de Gaza.

Las autoridades locales comunicaron que las víctimas son resultado de tres ataques separados que afectaron a varias familias en la región y muchos de ellos eran niños de menos de 16 años de edad.

En paralelo a la ofensiva en Gaza, las fuerzas israelíes han intensificado las detenciones en Cisjordania.

Desde el 7 de octubre, más de 10.300 palestinos han sido arrestados en esta región, según datos de la Autoridad de Asuntos de Prisioneros y el Club del Prisionero Palestino. Entre los detenidos se encuentran 720 menores y 96 periodistas, de los cuales 50 permanecen encarcelados.

En tanto, la ciudad de Yenín, en el norte de Cisjordania, lleva cinco días seguidos bajo una ofensiva militar israelí a gran escala y un asedio que la ha mantenido bajo control.

Según fuentes palestinas, el 80 por ciento de la ciudad se encuentra sin agua, las líneas de electricidad se encuentran seriamente dañadas y al menos 20 kilómetros de la red de alcantarillas han sido totalmente destruidas.

Este domingo, como respuesta a las incursiones masivas israelíes a Cisjordania, Brigadas Al-Qassam y las Brigadas Al-Quds, alas militares de Hamás y la Yihad Islámica, respectivamente, han llevado a cabo emboscadas y ataques contra las fuerzas israelíes, resultando en bajas confirmadas entre las tropas invasoras.

Críticas a Netanyahu

En medio de esta situación, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, enfrenta crecientes críticas tras la recuperación en Gaza de los cadáveres de seis prisioneros israelíes.

Los cuerpos fueron hallados en un túnel en la ciudad de Khan Yunis y, según informes, pertenecían a ciudadanos capturados por la resistencia palestina durante el ataque del 7 de octubre.

Familiares de los rehenes han acusado a Netanyahu de entorpecer las negociaciones con Hamás y de priorizar su agenda política por encima de los intereses nacionales.

El exministro de Defensa, Benny Gantz, también ha criticado duramente al primer ministro, instando a la población a manifestarse en su contra. Gantz, junto con otros líderes de la oposición, ha argumentado que la falta de una estrategia diplomática que complemente la presión militar está condenando a los rehenes a la muerte.

«El primer ministro Netanyahu duda, tiene miedo y gana tiempo por consideraciones políticas en lugar de actuar. Un juego que cuesta vidas humanas. El primer ministro debería proteger a los secuestrados y a los ciudadanos de Israel, y no a su coalición controlada por extremistas», expresó Gantz en sus redes sociales.

Desde el inicio de la ofensiva israelí el 7 de octubre, la cifra acumulada de fallecidos en Gaza ha aumentado a 40.738 personas, mientras que el número de heridos alcanza los 94.154.

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